domingo, 22 de mayo de 2022

Moisés.





Se despertó sobresaltado. Sus recuerdos se nublaban mientras intentaba recomponer realidad y sueño en su mente. La mañana anterior, tras el mensaje recibido de Giuliano della Rovere, por aquel entonces ya Giulio ii, Julio ii, comenzó a trabajar haciendo centenares de dibujos y estrujando su mente para encontrar un conjunto iconográfico a la altura del encargo que acababa de recibir y que encandilase al papa para su tumba que sería un mausoleo monumental. No dejó de hacer esbozos y escribir ideas hasta que le venció el sueño bien entrada la noche tras varios días encerrados trabajando sin descansar. Como le ocurría con frecuencia cuando le embargaba el entusiasmo había dejado de lado todo lo demás. Buonarroti estaba trabajando en Florencia a donde había regresado tras su marcha en 1492 con la muerte de Lorenzo de Médici que había sido su mecenas, pero el encargo papal le entusiasmó de tal modo que volcó en él toda su energía. Miguel Ángel ya era un prestigioso artista que había finalizado su David donde había mostrado todas sus habilidades que dotaban a sus esculturas de una vitalidad humana inaudita.


En el sueño se le había presentado Moisés, un Moisés terrible, cruel, dispuesto a castigar a su propio pueblo por la traición que cometió contra Yahvé y entonces Miguel Ángel supo que este debía ser el motivo central de la composición, aunque inicialmente lo mantendría en secreto. Pero Moisés, durante el sueño, le había golpeado en la rodilla varias veces instándole a levantarse para seguir trabajando, y Miguel Ángel, exhausto, se negaba una y otra vez poniendo de manifiesto su arisco temperamento. Entonces Moisés lleno de ira y hastiado de la pueril objeción de Buonarroti mostró todo su poder y su grandeza levantando con sus propias manos al artista y lanzándolo contra el escritorio repleto de papeles con las anotaciones y bosquejos que había hecho durante todo el día. Ahí fue cuando despertó. Levantó la cabeza que estaba apoyada en su antebrazo derecho y, tras estirarse para deshacerse del dolor de cuello que le había provocado la incómoda postura, sus ojos se fijaron en el último croquis que había dibujado y que apenas recordaba. Se trataba de un dibujo del propio Moisés, sentado, pero con todos los músculos tensionados, sujetando las tablas de la ley reveladas por Dios en el monte Sinaí, lleno de ira, de terribilitá, con la cabeza girada hacia su lado izquierdo y el ceño fruncido, con los ojos penetrantes buscando el merecido castigo para su pueblo, infiel e idólatra, a punto de mostrar toda su ira y con un fulgor resplandeciente que coronaba su cabeza bajo la forma de pequeña cornamenta y que manifestaba su colosal poder. Miguel Ángel se azoró ante el ímpetu de su propio dibujo, pero prosiguió con su trabajo cuando ya las primeras luces del alba le permitieron prescindir de las candelas. 


Poco tiempo después marchó a Carrara para buscar los bloques de mármol que darían vida a su obra, pero había comprendido que este sería un trabajo maldito para él por haberse enfrentado al profeta. En ese mismo año del encargo, 1505, le presentó al papá un primer proyecto para su tumba, pero los fondos que había puesto a disposición del artista se habían agotado y el papa despidió a Buonarroti que regresó sumamente contrariado a Florencia. Miguel Ángel solo consentirá encontrarse con el papa en Bolonia en 1506 bajo la amenaza de la excomunión y será allí donde Julio ii dispone perdonar al artista por considerarlo el único capaz de hacer una obra que trascendiera por toda la eternidad. 


Tras los trabajos de la Capilla Sixtina encargados por el propio Julio ii y que se prolongaron desde 1508 hasta 1512, Miguel Ángel retoma el encargo y esculpe el Esclavo Moribundo y el Esclavo Rebelde que nunca llegarán a estar en la tumba. También trabaja en el Moisés y lo completa en 1513, año en el que fallece el papa. Miguel Ángel con la escultura terminada, en actitud temeraria, se atreve a golpear la rodilla del Moisés para pedirle que le hablase. En ese mismo año se modifica el contrato que comprometía al artista transformando el mausoleo en una tumba adosada a la pared. Miguel Ángel lo asume, aunque la complejidad iconográfica del conjunto toma mayor relevancia. El periplo escultórico prosigue y Miguel Ángel, en torno a 1520, esculpe el Genio de la Victoria que finalmente no formó parte de la tumba al igual que otros esclavos inconclusos. En la década de 1540 herederos del papa, cierran otro acuerdo con Miguel Ángel y este comienza el montaje de la tumba en 1542 en la basílica de San Pietro in Vincoli muy vinculada a la familia della Rovere. La tumba se completará en 1545 con la escultura de Moisés como núcleo del monumento parietal y como única pieza completamente realizada por el artista.


Miguel Ángel, poco antes de su muerte en 1564, se enfrentó de nuevo al Moisés y se plantó frente a él postrándose de rodillas, pero sin ocultar su actitud altiva.


—Ahí sigues —le dice Miguel Ángel mirándole duramente aunque consciente de que el Moisés le ignora con la mirada —. Me sobrevivirás, sé que lo sabes. ¿Qué fue lo que provocó tu ira contra mí? Nunca dejé de trabajar en ti. Nunca me rendí. Nunca quise prescindir de tu presencia, siempre consentí que estuvieses al frente de esta obra. ¿Fue acaso mi cansancio, que nunca pereza, lo que provocó tu ira contra mí?, ¿no te sirvió que mi cuerpo no pudiera responder más, agotado como estaba tras las intensas horas de esfuerzo? ¿Acaso pensaste que mis manos no eran dignas para esculpirte? Respóndeme ahora y marcharé para dejarte tranquilo por siempre jamás.


Miguel Ángel, con los huesos doloridos por los años de trabajo en posiciones inverosímiles para poder crear su arte, se incorpora, hace una genuflexión y se marcha dándole la espalda para siempre a su querido Moisés.



Foto del Moisés de Miguel Ángel de origen desconocido.

En Roma a 20 de mayo de 2022, durante la estancia como profesor invitado en el seminario SPAZI DI CELEBRAZIONE NEL PATRIMONIO STORICO-ARCHITETTONICO DELL'ESTREMADURA IN SPAGNA, SAPIENZA, UNIVERSITÀ DI ROMA.

Rubén Cabecera Soriano.

@EnCabecera

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