Reurbanización del Paseo de la Palmera en Herrera del Duque. Premio de Urbanismo de la Junta de Extremadura 2019.
El pasado viernes 12 de noviembre de 2021 se celebró la entrega de premios de Urbanismo de la Junta de Extremadura en la que tuvimos la suerte de ser galardonados con el primer premio en la modalidad Actuación de urbanización, dotación o infraestructuras en espacio público.
Es todo un orgullo poder recibir este premio que atestigua el trabajo y el esfuerzo constante de aiuEstudio por mejorar la sociedad. Este compromiso con nuestro entorno está grabado a fuego desde nuestros inicios en 2002 y ahora, en vísperas de nuestro veinte aniversario y a pesar de las inmensas dificultades económicas contra las que nos enfrentamos que han devaluado y denostado hasta límites deplorables nuestra profesión premiando la mediocridad frente a la excelencia, supone un espaldarazo que nos permite renovar fuerzas y seguir luchando por mejorar nuestra sociedad desde la arquitectura y el urbanismo que es nuestra profesión.
Vaya por adelantado nuestro agradecimiento al Ayuntamiento de Herrera del Duque por confiar en nosotros creyendo en apuestas arriesgadas que suponen un cambio de paradigma en el urbanismo al que estamos acostumbrados y que son capaces de transformar la forma en que vivimos nuestras ciudades. Gracias a su alcalde, Saturnino, a sus técnicos, en especial a Antonio, gracias a la Diputación de Badajoz por haber permitido el desarrollo de este proyecto, a las empresas que han intervenido ejecutándolo, Senpa, Majoin y Magenta y, por descontado, a la ciudadanía de Herrera del Duque por su paciencia y comprensión. También a la Junta de Extremadura por el reconocimiento y al Colegio de Arquitectos de Extremadura por su apoyo. Pero, además, debo agradecer personalmente el gran trabajo que realiza cada día todo el equipo de aiuEstudio y quiero que cada uno de ellos sienta como propio este premio, enhorabuena a Alberto, Juanma, Apa, Marcos, Sergio, Sete, Baltasar, Julie, Pedro, Jesús, Alba, Miriam, … Algunos de ellos ya no desarrollan su profesión con nosotros, otros siguen y deseamos que sigan durante mucho tiempo. De todos vosotros es este premio.
Es necesario apostillar que este ímprobo esfuerzo que recoge el trabajo de tanta gente merece su justo reconocimiento desde las instituciones. En este sentido, le ruego a la Junta de Extremadura que en sucesivas ediciones no se olviden de los redactores de los proyectos, pues toda innovación en arquitectura y urbanismo nace de nosotros y somos nosotros quienes peleamos constantemente, en ocasiones al límite de nuestra propia dignidad, para lograr mejoras en nuestra sociedad gracias a nuestro compromiso con ella. Solo pido que, al menos, podamos sentirnos orgullosos de nuestro propio trabajo y que no permanezcamos en un segundo plano limitando la importancia de nuestra participación.
A continuación, quiero compartir un resumen de nuestro análisis para la transformación de esta calle en plaza: la calle es plaza.
La sostenibilidad urbana es la búsqueda de un desarrollo urbano que se realice bajo los parámetros de la sostenibilidad, esto es, que no degrade el entorno proporcionando calidad de vida a los ciudadanos según se indicó por primera vez en el en el Informe Brundtland originariamente denominado “Nuestro Futuro Común” elaborado en 1987 para las Naciones Unidas. Esta intervención pretende reconciliar el bienestar económico, los recursos naturales con la sociedad, evitando de este modo comprometer el desarrollo local del municipio, priorizando al ciudadano frente al vehículo y asegurando la accesibilidad de este a todos los espacios públicos generados.
El antiguo bulevar generaba una barrera infranqueable para el peatón, consecuencia de las reducidas dimensiones de este. Esto convertía el paseo en una suerte de rotonda alargada en la que el tráfico prevalecía sobre el peatón.
Imagen 1. Paseo de la Palmera en construcción.
El Paseo de la Palmera de Herrera del Duque se ubica en la parte central de la localidad, conformando, tal vez, la principal vía de acceso al municipio. Tiene una superficie de unos 7.230m2, incluyendo las zonas aledañas de intervención.
Se trata de un espacio público al que llegan varias vías importantes: por el noreste la Calle Comendador Arias Pérez, por el sureste la Avenida del Ejército, por la parte noroeste la calle Feria, en prolongación con la calle Carrera; la Avenida de Extremadura continúa la dirección de la Avenida la Palmera en sentido suroeste, constituyendo esta, junto con la Avenida La Palmera y la calle Comendador Arias Pérez, la travesía urbana de la ctra. BA-138, vía titularidad de la Excma. Diputación Provincial de Badajoz.
Esta mezcla de calles hace que el tránsito rodado en el entorno de la Avenida se complique y se dificulte por las necesidades de aparcamiento que aparecen asociadas a dicha fluencia.
Se hizo necesario un planteamiento nuevo que pusiese en valor al peatón frente al vehículo y se generasen, en consecuencia, espacios públicos de disfrute para los ciudadanos.
Imagen 2. Zonas de análisis previo para el desarrollo del proyecto.
El entorno analizado para el desarrollo de este documento excede el ámbito desarrollado de forma particular. Se hizo un estudio pormenorizado de los viales principales de la ciudad vinculados de forma directa con el Paseo de la Palmera que constituye el eje vertebrador de la intervención. Estos entornos pueden separarse por su ubicación con respecto al eje referido en TRES partes bien diferenciadas, peo que reciben un tratamiento unitario con la idea de mejorar el entorno urbano del paso de la Palmera, así como la conexión este-oeste de la localidad.
El estudio del conjunto, que vertebra la localidad desde la centralidad que proporciona el eje del Paseo de la Palmera potenciando el uso peatonal de las vías analizadas frente al vehículo, se inició con un análisis de las circulaciones rodadas en las calles estudiadas y las adyacentes para comprobar la viabilidad de la intervención. Tras el mismo se procede a desarrollar una propuesta conjunta auspiciada por el radical cambio propuesto para el Paseo de la Palmera que se transforma del bulevar original a una calle con unos acerados muy amplios para uso y disfrute del ciudadano aislando visualmente el tráfico, centrado en el eje de la calle y eliminando los aparcamientos, con la pantalla que generan las dos hileras de palmeras. Esta predominancia del peatón se extiende a toda la zona estudiadas procurando, sin embargo, recuperar las plazas de aparcamiento eliminadas del Paseo con una óptima ordenación del entorno. Las tres zonas estudiadas conectan la ciudad de este a oeste y con la parte norte, por cuanto la zona sur en las que se ubican la Plaza de España y el Ayuntamiento ya han sido remodeladas.
La intervención estudiaba las 3 partes descritas pretendiendo dotar a la localidad de una infraestructura viaria en la que predomine el peatón en sus vías principales de entrada y salida y conexión desde las mismas hacia una de las zonas de mayores infraestructuras urbanas de carácter ciudadano.
Parte 1: Acometiendo a la parte noreste del Paseo tenemos la calle Comendador Arias Pérez (referencia BAV- 7114) que comunica con la N-502. Se trata de una calle de unos 240m de longitud por la que accede en la actualidad la mayor parte del tráfico externo a la localidad. Esta vía se convertirá en una calle de carácter más peatona gracias a la creación de la circunvalación de la localidad.
Parte 2: Conexión con el Paseo de la Palmera en su parte suroeste con la calle Feria y prolongación hasta la plazoleta de las viviendas sociales y calle Rodeo. Se trata de un tramo de unos 590m que conecta con el Palacio de Congresos de Herrera del Duque y revitaliza con la intervención la plazoleta de las viviendas sociales que recibe un tratamiento similar al del Paseo. La intención es, además de humanizar estas calles, algo desoladas, revitalizar y regular un entorno en el que predomina el vehículo frente al peatón.
Parte 3: Conexión desde la parte suroeste del Paseo con la Avenida de Extremadura (continuidad de la BAV- 7114) conectando con el polígono industrial y la salida hacia la localidad de Peloche. Esta intervención, al igual que las otras pretende reordenar el espacio urbano dotándolo de una característica más peatonal frente a la predominancia del vehículo. Esta parte tiene una longitud aproximada de 470m de calle sobre la que se actúa
Se trata, por tanto, de una intervención que plantea la renovación del entorno de la Palmera buscando las conexiones con los elementos más significativos de la ciudad completados con la renovación ya ejecutada de la Plaza de España y del Ayuntamiento de Herrera, que se encuentran en la parte sur del Paseo.
La nueva ordenación convierte la calle en plaza. Lo hace desde la sostenibilidad y priorizando la accesibilidad del peatón frente al vehículo.
Los nuevos espacios creados son de uso eminentemente peatonales frente al sobreesfuerzo urbano que el tráfico rodado imponía en el antiguo bulevar y que impedía la utilización de un ámbito de grandes dimensiones sometiéndolo al tráfico y a los aparcamientos.
Con esta intervención el peatón adquiere relevancia y los espacios se orientan a él, siempre desde los dos parámetros indicados: SOSTENIBILIDAD y ACCESIBILDAD.
En primer lugar, la calle se convierte en un continuo, a modo de plataforma única en el que se ensanchan las aceras, se eliminan los desniveles, se utilizan texturas para diferenciar pavimentos, se colocan referencias con distintos colores para personas con capacidades visuales mermadas y se busca la ampliación de los espacios urbanos acompañados de un mobiliario acorde a la nueva oferta que este espacio ofrece a los peatones.
En segundo lugar, se incluyen elementos vegetales, además de las palmeras originales para dotar de una suerte de microclima al paseo gracias también a la utilización del agua pulverizada y a las fuentes de suelo. Todo ello con recuperación de aguas acordes a los parámetros sostenibles actuales.
Además, la iluminación que se ejecuta es de tipo LED reduciendo los consumos. Por último, en la zona oeste, se genera un espacio cubierto con un textil de colores y permeable para delimitar una zona de celebración de eventos y pasacalles potenciando el uso sociocultural de la reurbanización.
El objeto de esta intervención urbana fue la reurbanización del Paseo de la Palmera de Herrera del Duque con la remodelación de dicho espacio y la reordenación de los elementos definitorios de este espacio público; reorganizando el tráfico en la avenida para centrarlo al eje de esta respetando las características palmeras existentes, y dejando en las zonas colindantes a las fachadas un acerado con proporción de plaza pública a ambos lados de la calzada.
El objetivo primordial es la recuperación y la puesta en valor de dicho espacio priorizando el uso y disfrute del entorno cara al peatón.
Esta intervención convertirá la avenida en un espacio fundamentalmente peatonal de plataforma única con tráfico reducido y reordenando los espacios de circulación rodada, llevándolos centro de la calle, que se ensancha en lo referente a sus acerados ofreciendo una amplia zona que da mayor empaque a las fachadas laterales y permite la creación de un espacio amplio para la celebración de actos, siendo esta otra de las finalidades de la intervención.
La vegetación existente originalmente en la calle se limitaba a las palmeras. Estas se respetaron y se complementan con unos parterres de forma irregular que se llenan de vegetación. Se pretende aclimatar el espacio transformándolo en una zona de paseo y estancia.
Se habilitan accesos a las cocheras existentes a través de rodadas marcadas en el pavimento y a las zonas de carga y descarga de la calle. Se ubican bolardos removibles para el control y restricción del acceso en caso necesario.
El mobiliario urbano se ubica estratégicamente a lo largo de la calle intercalado entre los zigzagueantes parterres para crear zonas de descanso y cobijo para el peatón facilitando al mismo tiempo la posibilidad de crear terrazas para ser explotadas por el sector servicios. Estas zonas delimitadas por la geometría vegetal están dotadas de agua pulverizada y de fuentes, al igual que el gran espacio cubierto con elementos textiles que permiten el disfrute de estas zonas en época estival.
La zona de pavimento adoquinado; acabada mediante adoquín oscuro gris quintana, que es la destinada al tráfico rodado, se delimita mediante resaltos ejecutados con el propio pavimento en su encuentro con la zona ajardinada para que, en las calles de dirección norte-sur de la avenida, se permita el tráfico rodado asegurando que no invade la zona peatonal. El pavimento de la zona peatonal se resuelve con losetas de granito de gran formato.
Las premisas de trabajo con las que se trabajó para asegurar la sostenibilidad fueron:
· Utilización responsable del agua pulverizada para control térmico.
· Utilización de la capa vegetal como elemento de control solar.
· Utilización del textil en la parte oeste para regular la temperatura y ofrecer sombra.
· Utilización de iluminación de bajo consumo (LED) para favorecer el uso del espacio público en cualquier momento.
En el diseño de la actuación se ha tenido especial cuidado a la hora de seleccionar materiales compatibles con el entorno, sostenibles y que facilitasen el uso por parte de los peatones. En este sentido, la definición constructiva de la intervención resuelve la problemática que genera una renovación urbana con sencillez, pero con contundencia, de modo que sirvan como referente a la localidad.
La utilización del agua y la vegetación forman parte indisoluble de la intervención junto con la accesibilidad que prioriza a los peatones frente a los vehículos sin desdeñar el funcionamiento de las calles como elementos ordenadores del tráfico.
Imagen 7. Evento nocturno en la calle, en la plaza.
LA CALLE ES PLAZA
Subyace en la intervención una idea que engloba la totalidad de las actuaciones: La versatilidad de este espacio urbano que permite su transformación radical en un entorno en el que es posible realizar todo tipo de eventos diurnos, nocturnos, sociales o culturales. La idea es sencilla: LA CALLE ES PLAZA.
Esto se logra potenciando el uso peatonal frente al rodado y habilitando un entorno público capaz de sostener cualquier uso sin ver reducida su capacidad urbana.
De este modo, este espacio no solo sirve para reordenar el tráfico y facilitar el tránsito peatonal en la zona central de la localidad, sino que se convierte en un elemento integrador sociocultural gracias a esa transformación provocada de calle en plaza para la que se desarrollado toda la actuación.
Se pretende que este espacio público sea dominado por el ciudadano, que este lo haga suyo ya sea mediante un paseo, un café, un pasacalle o un concierto. La calle se vive gracias a que la calle es plaza.
Imagen 8. La plaza, la calle, de noche.
Esta intervención remodela del entorno de la Avenida la Palmera de Herrera del Duque con un proyecto de urbanización que da preeminencia al peatón frente al vehículo, aunque sin limitar su circulación, y transforma un espacio, en su mayor parte rodado, en peatonal.
Se recomponen todas las instalaciones que se ejecutan de forma paulatina con las acometidas a los inmuebles, con lo que la intervención aquí descrita previó esta circunstancia.
Al mismo tiempo, se realizaron unas intervenciones previas orientadas a preparar la calle para su transformación en plataforma única con la idea de potenciar el uso y disfrute de la calle por parte de los peatones primando estos sobre los vehículos.
De este modo se ajustaron los perfiles para que el tránsito a lo largo de todo este espacio público no requiriera peldaños ni resaltos adecuando, en la medida de lo posible, la topografía a la nueva calle y respetando los accesos existentes a los inmuebles de ambas fachadas.
Los nuevos parterres sirven para incorporar a la calle zonas de sombra y salvar de la vegetación preexistente las palmeras. Al mismo tiempo se generan pasos específicos de peatones que atraviesan las calles de viario restringido diferenciado con un pavimento de adoquín blanco, evitando usar pintura en esta zona, con las zonas peatonales de acerado.
Se incorpora el agua como elemento primordial en la intervención, recirculada, procurando el menor consumo posible, pero ofreciendo con la pulverización y con las fuentes de suelo un entorno más amable para el peatón, sobre todo en época estival.
Los pavimentos son el elemento definitorio del uso de los viarios, así, tenemos el adoquín oscuro gris quintana para la zona de circulación y la loseta de granito gris quintana claro para las zonas específicamente peatonales.
Imagen 9. Fotos aéreas del estado original, del modificado y del modificado con la iluminación nocturna.
Enlace a la noticia:
http://www.juntaex.es/comunicacion/noticia?idPub=35142#.YZCwUL2E7zc
En Mérida a 14 de noviembre de 2021.
Rubén Cabecera Soriano.
@EnCabecera
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