Países en vías de subdesarrollo. Fuente: http://traeconomia.blogspot.com.es/ |
Aparece una nueva categoría de país en la historia de la humanidad: el país en vías de subdesarrollo.
A la cabeza de esta nueva forma de progreso (ciertos políticos
llaman al decrecimiento, crecimiento negativo) mundial se encuentra Grecia.
Aunque es evidente que muy de cerca les sigue Portugal, Irlanda y España.
¿Quién sabe si alguno más? Tal vez Italia. Resultan clarificadoras, por cuanto
son inútiles, todas las tentativas realizadas por renombrados economistas,
desautorizados políticos y, en algunos casos, libre pensadores para explicar el
origen de esta situación de crisis global, nótese que no adjetivo la crisis
como económica. Son todas erróneas puesto que es imposible encontrar
explicación al egoísmo social, germen real del mundo que vivimos. Nadie ha
sido, ni posiblemente será capaz de encontrar una explicación razonable y
sencilla al actual escenario si no es desde la reflexión sociológica, buscar
explicaciones económicas para este caos es materialmente imposible. En cambio
sí que podemos dilucidar de manera extremadamente simple la consecuencia que
sobre las naciones y, por tanto, sobre sus sociedades y miembros de las mismas,
tiene esta crisis: pobreza. Esta es la exégesis del mundo actual. Estamos abocados
a ser más pobres, mucho más pobres, porque habrá unos pocos mucho más ricos.
Tal vez hayamos vivido por encima de nuestras posibilidades, engañados por el
consumismo falaz que nos ofrecía en la riqueza material la feliz solución a lo
que para ellos eran nuestras tristes vidas; consiguieron convencernos. Y todo a
un precio increíblemente económico: nuestro endeudamiento de por vida. Hemos
caído en el engaño, hemos vendido nuestra alma al diablo, léase alma como
nuestro trabajo y diablo como los mercados, los bancos. No es posible salir de
esa situación porque el contrato que nos une a ellos está firmado con sangre,
nuestra propia sangre. Sólo nos queda resignarnos y desear que nuestra deuda
sea saldada; por nosotros con paciencia y gran esfuerzo o, en nuestro nombre, por
quienes posean como auténtica virtud la caridad.
Rubén Cabecera Soriano.
Mérida a 20 de junio de 2011.
Sí existe una explicación económica a lo que está sucediendo en España actualmente, sin ignorar por supuesto que en el fondo -y en la superficie- la economía es siempre política, y a ella se pliega y hasta le hace reverencias. La explicación se llama "Devaluación interna", aunque podría llamarse perfectamente, como muy bien señalas, "la vía del subdesarrollo", porque justamente consiste en eso: en un empobrecimiento consciente, voluntario y acelerado del país a fin de conseguir ventajas competitivas mediante un abaratamiento de la mano de obra que haga posible el incremento de las exportaciones; el hundimiento de las importaciones -y el del consumo interno ya de paso, y el de todo bicho viviente que no pueda salir al exterior por extensión- y la mejora de la balanza de pagos. Vamos, la versión salvaje de la devaluación monetaria de toda la vida; la única vía -de subdesarrollo- que han encontrado, o les han permitido los poderes fácticos, las luminarias que nos manipu... digo, que nos gobiernan.
ResponderEliminarO dicho en verso: ponerle en claro a la clase dominada quién es aquí la clase dominante.
Efectivamente, estamos sometidos al yugo de la moneda única que imposibilita su devaluación cuando las economías periféricas no pueden asumir el ritmo de la locomotora porque centran sus esfuerzos en reducir su déficit sin que nadie se pare a pensar de dónde proviene dicho déficit o a dónde nos lleva su reducción que impide el estímulo de la economía no de escala... Y sin embargo nos obligan a ser más competitivos, con lo que la única opción "real" desde el punto de vista de la ortodoxia liberal es reducir los sueldos para lo que primero es necesario despedir a los trabajadores vía legislación laxa en materia de trabajo... Esto es, países en vías de subdesarrollo.
EliminarMás razón que un santo. Y sin protestar, que al que se mueva le dan de palos y hasta se le aplica ley antiterrorista. Como dice el subtítulo del blog, la qué nos ha tocaó vivir, jacho...
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